Policía de Nueva York
Nueva York, EFE – El alcalde de Nueva York, Eric Adams, anunció este jueves que la ciudad ha reforzado la seguridad y aumentado la presencia policial en respuesta a los recientes actos violentos ocurridos en Nueva Orleans y Las Vegas, que dejaron múltiples víctimas fatales y heridos.
“Si bien no hay amenazas inmediatas para nuestra ciudad en este momento, por precaución, hemos aumentado la seguridad y la presencia del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) en lugares relevantes, como la Torre Trump y Times Square”, afirmó Adams en una publicación en la red social X.
En la madrugada del Año Nuevo, un atropello masivo en el centro de Nueva Orleans dejó al menos 15 muertos y más de 30 heridos durante las celebraciones. El perpetrador, Shamsud-Din Bahar Jabbar, de 42 años, fue identificado como ciudadano estadounidense que previamente había expresado en redes sociales su admiración por el Estado Islámico (EI) y manifestado deseos de cometer un ataque.
El incidente ocurrió alrededor de las 03:15 hora local (09:15 GMT) y ha sido calificado como uno de los más graves en los últimos años en esa ciudad.
Pocas horas después, una explosión frente al Trump Hotel de Las Vegas dejó al conductor del vehículo fallecido. Las autoridades investigan el caso como un posible acto terrorista, aunque no se ha establecido una conexión directa con el ataque en Nueva Orleans.
En la noche del miércoles, un tiroteo en Queens, Nueva York, dejó al menos 10 heridos. Según el NYPD, este incidente no está relacionado con terrorismo, sino con posibles ajustes de cuentas entre pandillas. El tiroteo tuvo lugar durante un evento en homenaje a un líder pandillero fallecido, reforzando esta hipótesis.
El alcalde Adams subrayó la importancia de la vigilancia y las medidas preventivas en una ciudad como Nueva York, que por su atractivo turístico y sus sitios emblemáticos es un potencial objetivo.
La seguridad se ha incrementado especialmente en puntos estratégicos como Times Square, una zona que tradicionalmente recibe grandes multitudes.
El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) está en alerta máxima mientras continúa monitoreando cualquier amenaza potencial que pueda surgir en relación con estos eventos.